El diputado madrileño Pedro Sánchez ha sido elegido secretario general del PSOE con el 48,6 % de los votos, frente al 36,19 % del vasco vasco Eduardo Madina, y el 15,12 % del representante de Izquierda Socialista, José Antonio Pérez Tapias, en una consulta en la que han participado el 65,8% de los militantes.
De los 129.411 afiliados que han votado, 62.477 lo han hecho a Pedro Sánchez, 46.439 a Madina y 19.384 a Pérez Tapias. Sánchez ha ganado en once de las diecisiete comunidades españolas y ha arrasado en Andalucía, la federación más numerosa del partido y la más poderosa políticamente.
Con una participación superior a la media (69,33%), los andaluces se han volcado con él: 20.381 votos (el 61,14%), frente a los 7.726 de Eduardo Madina (23,18%) y los 5.226 de Pérez Tapias (15,68%).
Madina, que ha perdido en Euskadi, aunque se ha impuesto a Sánchez en su Vizcaya natal, ha sido el más votado en Asturias, Cantabria, Castilla y León, Cataluña, Extremadura, Navarra. También en Ceuta y en las agrupaciones del PSOE en Europa. Aclamado por unos 200 militantes en la sede federal de su partido, Pedro Sánchez ha renovado su compromiso de "unidad" y ha ofrecido a Madina y a Tapias que formen parte de una ejecutiva que -ha avanzado- estará "tan a la izquierda como la militancia de base".
"En el PSOE que vamos a construir no sobra nadie, falta gente, todo aquel que quiera arrimar el hombro va a contar con el secretario general", ha ofrecido. Tras agradecer a la ejecutiva saliente y en especial a Rubalcaba que haya "propiciado" esta consulta, ha proclamado que la puerta de la elección por voto directo de los militantes "ya no se va a cerrar nunca más".
Para la "ingente" tarea de "cambiar el PSOE para cambiar España", Sánchez ha insistido en convocarles "a todos" y les ha dicho que lo primero será recuperar la "seña de identidad" de un partido que siempre ha "aspirado a gobernar y no se ha contentado con protestar". "Vamos a proteger al más débil, a unir España y a tener una voz nítida en Europa", ha proclamado. Ha renovado asimismo sus compromisos de dar más poder y participación a las bases, rejuvenecer la organización, forjar alianzas y sacar adelante un proyecto socialista "laico" y un PSOE "apasionado en la noble tarea de modernizar España y Europa".