Florida trabaja estos días muy duro en su recuperación tras los daños causados por el huracán Irma, con un mayor esfuerzo en los devastados Cayos, en el extremo sur de EEUU, donde hasta el momento se han reportado una treintena de muertos, 12 de ellas en este estado.
La cadena de islas que conforman los Cayos, de unas 110 millas de largo y cerca de 80.000 habitantes, se llevó la peor parte después de que la mañana del pasado domingo el ojo del huracán Irma pasara sobre el Cayo Cudjoe y golpeara con furia la zona.
Las imágenes de los medios muestran embarcaciones arrastradas al interior por los vientos huracanados y las poderosas olas, además de arboles tronchados, escombros acumulados y casas dañadas, mientras que miles de residentes de estas islas que decidieron no evacuar, se calcula que unos 10.000, se encuentran atrapados entre los escombros.
El 25% de los edificios de los Cayos de Florida, donde el huracán Irma impactó el domingo como categoría 4, quedaron totalmente destruidos y el 65% presentan daños severos, indicó un portavoz de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) de EEUU.
Brock Long, administrador de FEMA, indicó que siguen analizando la situación en estos pequeños islotes que representan el extremo sur de EEUU, pero que "básicamente, cada casa en los Cayos fue impactada de una forma u otra", informó CNN.
El gobernador de Florida, Rick Scott, señaló que las áreas más dañadas se sitúan entre Cayo Hueso y Marathon, ambas en los Cayos, y en donde se observan casi todas las casas móviles volcadas.
Martin Senterfitt, el director del departamento de Control de Emergencia del condado de Monroe, al que pertenecen los Cayos, resaltó que, pese a la devastación causada por Irma, estima que la cifra final de muertos será baja, aunque precisó que la situación es de "crisis humanitaria".
Las autoridades permitieron el acceso a lo residentes de los cayos más septentrionales, mientras que algunos vecinos expresaron a los medios locales su convencimiento de que la catástrofe pudo ser peor.
Hasta el momento, de acuerdo a la oficina del gobernador, Rick Scott, solo en Florida 12 personas han muerto por causas atribuibles a Irma, seis en accidentes de tráfico debido al mal tiempo, cuatro mientras se preparaban para la llegada del ciclón, uno electrocutado y el último de un ataque al corazón mientras intentaba encender un generador eléctrico.
Entre los fallecidos en EEUU figuran tres personas en Georgia, dos de ellas debido a la caída de sendos árboles sobre una vivienda y un vehículo, mientras que en Carolina del Sur, donde se contabilizan 4 decesos, las muertes fueron por caída de árboles y accidentes de tráfico.
Mientras tanto, en el condado Miami-Dade (costa este de Florida), que recibió el impacto de las bandas exteriores del huracán, el panorama es de lenta recuperación. Poco a poco las calles van quedando despejadas de escombros, así como de árboles y tendido eléctrico caído.
El principal problema sigue siendo la recuperación del fluido eléctrico en los hogares, en momentos en que 5,4 millones de usuarios todavía no disponen de electricidad en sus casas, de acuerdo a cifras de la Oficina de Gestión de Emergencias de Florida.
Toques de queda, conducción, colegios y aeropuertos
Hasta ahora, la compañía de electricidad Florida Power Light (FPL) ha restablecido el flujo eléctrico en 200.000 hogares del condado Miami-Dade y otros 800.000 pronto recuperarán la electricidad, señaló a los medios Florencia Contesse, portavoz de FPL.
Esta firma manifestó que espera devolver el fluido eléctrico para la mayoría de lo clientes del sur de Florida a más tardar hacia el final del fin de semana.
En cuanto a Miami Beach, las autoridades reabrieron las autopistas de acceso a la ciudad que estuvieron desde el domingo cerradas, aunque el 90% de las señales de trafico están fuera de servicio y se mantiene un toque de queda a partir de las 11 de la noche por "motivos de seguridad", según el municipio.
Los colegios del condado de Miami-Dade, por otro lado, reabrirán en principio el próximo 18 de septiembre, dado que sufrieron daños mínimos.
Las autoridades de este condado levantaron el toque de queda impuesto el domingo pasado, tras la llegada del huracán de categoría 4 Irma al sur de Florida, mientras que el alcalde de la ciudad de Miami, Tomás Regalado, levantó también el toque de queda para los residentes de la ciudad.
El condado de Broward, aledaño al de Miami-Dade, también levantó el toque de queda, aunque las autoridades instaron a la población a extremar las precauciones al salir a la calle y conducir con extrema precaución dado que el 50% de los semáforos se hallan fuera de servicio.
Cerca de medio millón de usuarios permanecen sin luz en este condado, aunque unos 300.000 han recuperado ya el fluido eléctrico en sus hogares o negocios.
Asimismo, las autoridades evalúan los daños ocasionados por el huracán Irma en el Puerto de los Everglades, uno de los más importantes del este de EEUU, que recibe y distribuye combustible a doce condados de Florida.
El transporte en camiones de los depósitos de gasolina almacenados en este puerto antes de la llegada del ciclón ha comenzado ya a llevarse a cabo, aunque se desconoce cuando reabrirá el puerto para la recepción de nuevo combustible.
El Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) ha reanudado ya sus vuelos y servicio aéreo de cargo, aunque todavía de forma limitada.
El primer vuelo de American Airlines despegó esta mañana con destino a Las Vegas.
"MIA operará hoy con un 30% de vuelos regulares, un porcentaje que aumentará a diario hasta que se recupere el total de las operaciones, posiblemente este fin de semana", indicó en un comunicado Jack Varela, portavoz del aeropuerto.
También el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale/Hollywood (FLL) comenzó a operar algunos vuelos, aunque no se espera que recupere su capacidad total hasta el próximo fin de semana.