El acusado de doble asesinato Sergio Morate, se ha acogido a su derecho a no declarar a ninguna de las partes en el juicio que desde este lunes se celebren la Audiencia Provincial de Cuenca, ha llegado a dependencias judiciales entre gritos de "asesino" de varias personas que estaban esperando su llegada, entre las que se encontraban familiares de Laura del Hoyo, una de las víctimas.
Ante un amplio despliegue de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, cerca de una veintena de personas esperaban a Morate portando pancartas en las que se podía leer 'Todos los conquenses queremos que te pudras en la cárcel'.
Morate, que ha bajado del furgón policial encapuchado, ha sido increpado durante el breve paseillo hasta entrar en la Audiencia por varias personas, entre ellas la hermana de Laura del Hoyo, que ha tenido que ser aplacada por la policía.
La Fiscalía pide un total de 48 años de prisión al considerarle culpable del asesinato de su expareja y de una amiga de ésta en verano de 2015, arranca en la Audiencia Provincial de Cuenca este lunes, 23 de octubre, con jurado popular --el Tribunal del Jurado está compuesto por siete hombres y dos mujeres--, en una sesión en la que se ha solicitado el análisis de más de 40 pruebas.
En el escrito de acusaciones definitivo la Fiscalía solicita como pruebas a estudiar, a parte de las distintas actas de levantamiento de cadáveres o inspecciones oculares de los vehículos utilizados tanto por el presunto asesino como por las víctimas, grabaciones de conversaciones mantenidas por Marina Okarinska --expareja de Morate-- o las propias grabaciones del acusado una vez detenido.
Se solicita igualmente para dirimir la responsabilidad de Sergio Morate el testimonio de 27 testigos, al margen de la comparecencia de hasta 20 agentes de Policía Nacional que intervinieron a lo largo del proceso de detención.
El jurado popular rechaza aislarse y celebrar el juicio a puerta cerrada
El jurado popular que juzgará al acusado ha rechazado la propuesta de su abogado defensor de aislarse o de celebrar el juicio a puerta cerrada.
Tras quince minutos de deliberación, el portavoz del jurado ha explicado que todos los miembros del jurado "son personas lógicas capaces de tomar la decisión basándose únicamente en las pruebas" que se expongan en el juicio, y no por "la información de redes sociales o medios de comunicación". "
En cuanto a la propuesta de celebrar el acto a puerta cerrada, creemos en la no necesidad de que así sea, excepto cuanto se trate de temas delicados que puedan afectar a las víctimas", ha aseverado.
El presidente de la Audiencia Provincial, José Eduardo Martínez Mediavilla, ha decretado un receso de unos 30 minutos para tomar la decisión, toda vez que el jurado ha sido escuchado.