Publicidad

MITIN EN MURCIA

Zapatero apela a la humildad y a "un pelín de orgullo" para ganar el 22-M

El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha pedido hoy al PSOE humildad, unidad, talante y "un pelín de orgullo" para ganar las elecciones de mayo y dar así la vuelta a las encuestas, que a él, ha dicho, no le afectan, en su primer mitin de precampaña, en el que ha defendido sus decisiones.

Zapatero se ha expresado en estos términos en Murcia, en el primer mitin al que asiste después de anunciar ayer en el Comité Federal de su partido que renuncia a optar a un tercer mandato y en el que ha sido arropado por más de 6.000 personas, que han desbordado el pabellón "Príncipe de Asturias".

Como presidente del Gobierno, ha garantizado que el Ejecutivo "está haciendo lo que tiene que hacer pensando en el futuro de España", las reformas convenientes que, aunque hoy "generen problemas y dificultades, son la garantía de la prosperidad y el crecimiento de mañana".

"No pensando nada más que en eso, en el futuro de España", ha insistido, después de señalar que el PSOE ha tenido que sacar adelante esas medidas en solitario o con el apoyo de algunos grupos nacionalistas, que "han demostrado más interés por España que otros".

Gracias a esas reformas, ha hecho notar, se va a garantizar la estabilidad de la economía, por mucho que algunos vaticinaban que España tendría que pedir ayuda al exterior para financiarse, e incluso "algún que otro que lo deseaba".

El PP ha estado presente en una parte de su discurso, al ironizar con el hecho de que su anuncio de ayer le va a venir bien al partido de Mariano Rajoy, que va a tener que ponerse a trabajar en un proyecto en vez de limitarse a atacarlo y culparlo de todo, como ha dicho que ha ocurrido hasta ahora.

Hasta este momento, ha analizado, Rajoy se ha limitado a acusarle a él de todo, ya sea de un tsunami o de la situación en los países árabes. Rodríguez Zapatero, que es de los que piensan, según propia confesión, que hay que mantener el talante y la sonrisa siempre, "antes, después y toda la vida", ha emplazado a sus compañeros a ponerse a trabajar fuerte para ganar las elecciones de mayo.

"A mí las encuestas no me afectan", les ha asegurado en una intervención en la que ha repasado las medidas aprobadas por su Ejecutivo, con especial hincapié en estos últimos años de crisis.

Y ha querido dejar claro que, pese a todas las dificultades económicas, el Gobierno socialista ha mantenido sus "señas de identidad": las políticas sociales, la cohesión y el Estado del bienestar.

"Podemos comparecer con un cartel y con una fuerza clara en estas elecciones municipales y autonómicas", ha juzgado Zapatero, quien ha esgrimido como armas electorales el Plan E, el apoyo del Gobierno a quienes más lo necesitan, la defensa "como una roca" de la educación y la sanidad pública y la extensión de los derechos sociales.

Agradecido por todo el apoyo que, según ha apuntado, siempre le han dado, se ha comprometido a respaldar a todos los candidatos socialistas para el 22-M, y ha espoleado a sus compañeros para que no caigan en el desánimo: "Salgamos a estas elecciones con fuerza, con humildad y con orgullo".

Un orgullo, de acuerdo con su diagnóstico, propio de un partido que "tiene más de 130 años de historia en defensa de España, de los trabajadores, de la democracia y de sus derechos".

Está convencido Zapatero de que el PSOE puede dar la vuelta a las encuestas que pronostican una derrota considerable y ha hecho hincapié en que él nunca se ha dejado convencer por los sondeos; "y menos aún -ha apostillado- de lo que somos y lo que creemos.

Lo que tenemos que hacer nosotros es ganar las elecciones cambiando las encuestas". "Cuando todo el mundo sabe" que "lo único" que le mueve es el interés de España, ahora que ha renunciado a presentarse a la reelección, se ha mostrado plenamente decidido a sumar al PP, a los sindicatos y a los empresarios al "esfuerzo nacional" para que en un año o dos el país cuente con una nueva economía más productiva y más sana y haya empleo de mayor calidad.

Quiere además que a esa tarea se unan todos los gobiernos autonómicos, que "arrimen el hombro, sumen esfuerzos para tener las máximas energías concentradas" en lo que hay que hacer.

"Y eso se va a producir aunque nos cueste trabajo -ha agregado-, y nos va a costar (...), porque no va a ser ni rápido ni fácil". En ese empeño, ha garantizado "la determinación y las reformas necesarias", a lo que ha añadido su "compromiso demostrado" con las políticas sociales y la cohesión.

Zapatero se ha mostrado especialmente orgulloso de las políticas de igualdad que se han impulsado durante sus años de mandato, sin olvidarse tampoco del aumento de las becas, del incremento de las pensiones y de la defensa de los servicios básicos esenciales.

Tras reconocer que ha tenido que tomar decisiones difíciles para reducir el déficit, ha indicado que cuando decidió bajar un 5 por ciento el sueldo a los funcionarios o no revalorizar las pensiones para este año era porque podía explicar a los ciudadanos que, al mismo tiempo, se estaban aumentando las becas y manteniendo la educación pública. "Cuando hay que hacer un recorte hay que elegir. Gobernar es elegir, es decidir", ha dicho.

Publicidad