El corderito que quería ser un dálmata

Es un corderito, pero nadie lo diría. En realidad, es clavado a un cachorro de dálmata. Este animalito, con sus manchas blancas y negras, nació hace tres días en una granja de Australia y fue rechazado por su madre.

Pero no se va a quedar sin una familia. Una hembra de dálmata lo ha adoptado y lo cuida con esmero y cariño. El dueño de la granja asegura que el instinto maternal del perro ha resuelto el grave problema que padecía el corderito, alejado de su madre.

De momento, al corderito lo alimentan con biberón. Su dueño está dispuesto a dejarle con su madre adoptiva, pero también a venderlo a alguna familia que esté interesada en criarlo.