Dover, Sexy Sadie y Marlango celebran los 25 años de Subterfuge Records

'Serenade', 'Devil came to me' y 'Loli Jackson' no han perdido el tirón a pesar de los más de 17 años transcurridos desde su publicación, revelándose como himnos generacionales para quienes eran adolescentes en los 90 y que ya en la treintena abundaban esta noche entre los cerca de 8.000 asistentes a la primera de las dos jornadas de festival.

Poco ha importado que a la cantante Cristina Llanos, con el micrófono bajísimo, apenas se la escuchara bajo el impresionante muro de guitarras levantado por sus compañeros, porque el público se ha bastado para rellenar los huecos con sus voces, impelido por la descarga de energía que la banda madrileña ha recuperado tras la gira en la que rendían homenaje al citado álbum.

'Devil came to me' no fue la única pieza maestra que ayudó a construir el sello del pequeño diablo en su logotipo y pionero en la conformación de la actual escena independiente española. Muchas de aquellas otras obras importantes se han dejado escuchar también esta noche, recuperando incluso para la ocasión a grupos escindidos como Sexy Sadie, y fugados a otras compañías, como Dover.

El resultado ha sido una programación heterogénea en contenido y actualidad, conjugando los muy diversos estilos por los que el desprejuiciado corazón de Subterfuge ha latido estos años y aunando asimismo pasado y presente; por ejemplo, el fantástico directo de rock de bandas pujantes como McEnroe o Neuman y el tono jazzístico de Marlango, la banda de la también actriz Leonor Watling.

Lástima que la gran cantidad de referencias en un único escenario y la problemática de las restricciones de horario en la sede del evento, el urbano Matadero Madrid, al aire libre, hayan obligado a acotar los conciertos y convertirlos más bien en apuntes de solo media hora de duración que, en algunos casos, sabían a poco y apenas permitían entonar el cuerpo.

Tampoco el orden de los elementos parece haber sido el mejor, a tenor del bullicio oscilante de los presentes. Entre los que más han animado la noche se encuentra el dúo Ellos, con su desinhibida propuesta escénica y musical de pop y sintetizadores, que es una invitación segura a la fiesta con éxitos como 'Campeón' o 'Diferentes'.

Más lineales han sonado los shows de Marlango, a pesar del indudable magnetismo de su vocalista, y de Anni B Sweet, acompañada una vez más sobre el escenario por Noni López, vocalista de Lori Meyers, esta vez tras las cuerdas. Eso sí, la malagueña ha ganado varios enteros al cerrar el espectáculo en esta cita claramente nostálgica con su célebre versión de 'Take on me' de A-ha.

Con Sexy Sadie han vuelto a prender con fuerza las guitarras, sobre todo en temas como 'A brand new world' o 'In the water', pero la irrupción después del DJ set de unos hiératicos Alaska y Nacho Canut, cuando su horario ideal era uno mucho más cercano del cierre, como estaba previsto inicialmente, no ha ayudado a mantener el tono.

Había ganas de escuchar a Fangoria y no sus mezclas, de disfrutar de los dos discos de Subterfuge que les volvieron a poner en liza desde las cenizas de Dinarama, 'Arquitectura efímera' y 'Naturaleza muerta'. ¿La prueba? El tema más bailado ha sido 'No sé qué me das', y eso que iba enlatado.

Suerte que detrás han llegado Dover para reencontrar la energía y perder la voz en el mismo viaje, entre saltos y guitarreos desbocados. En cuanto ha terminado su breve paso por el DDM2014, buena parte del público ha cogido la puerta dejando claro cuáles eran sus intereses.

Para los que se han mantenido en sus posiciones, todavía ha quedado tiempo para disfrutar de Cycle y del siempre buen directo de una de las últimas sorpresas de Subterfuge, Corizonas, fruto de la unión de Arizona Baby y de Los Coronas, que vuelven a la carretera tras este concierto y que en breve ofrecerán nuevas canciones.