Jiménez Fortes recibe el alta tras la grave cornada sufrida en el cuello

El torero malagueño Saúl Jiménez Fortes ha abandonado el Hospital Clínico de Salamanca tras recibir el alta médica y pasar diez días ingresado tras la cogida que sufrió en el cuello el pasado 16 de agosto en la localidad salmantina de Vitigudino.

Fortes ha recibido el alta hospitalaria, tendrá que acudir todos los días al Hospital Clínico de Salamanca para realizarle las curas oportunas, por lo que no podrá regresar de momento a Málaga.

"Todo ha sido milagroso", han añadido  fuentes cercanas al diestro malagueño, para Jiménez Fortes que sigue recuperándose de la gravísima cornada que sufrió en Vitigudino y de la operación de cuatro horas y media a la que fue sometido en el Clínico de Salamanca.

La cornada fue considerada como muy grave, ya que, según el parte médico, afectó a la región mandibular izquierda, con traumatismo facial y cervical, y dos heridas más que afectan en 15 centímetros a la región laterocervical izquierda, base de la lengua y fosa amigdalina, además de fractura de maxilar superior, desgarro a nivel de paladar blando, así como fractura de vómer, lámina perpendicular del etmoides y rostrum esfenoidal.

El matador después de haber superado el percance ahora solo piensa "en volver a los ruedos" y en recuperar su "vida normal".

En una multitudinaria rueda de prensa ofrecida en el Hospital Clínico de Salamanca junto a su apoderado, Nemesio Matías, tras recibir el alta médica, Fortes ha explicado, de forma breve, que temió por su vida tras recibir la cornada y que fue consciente "en todo momento" de lo ocurrido.

"Las sensaciones que tengo son de ilusión, de ir dando pasitos hacia adelante y de poner toda mi voluntad para recuperarme, porque solo pienso en recuperar mi vida normal y en volver a los ruedos", ha afirmado el diestro malagueño.

Se trata de la cornada número quince de su carrera y la segunda de máxima gravedad en esta temporada, ya que en el pasado San Isidro sufrió un percance similar.