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ROSBERG, FALLÓN EN SEPANG
Hamilton logra la pole de Malasia con Sainz 16º y Alonso último
En cuanto se ha visto despojado de su liderato del Mundial, Lewis Hamilton ha vuelto a recobrar su mejor forma. El británico ha logrado la pole de Malasia en una clasificación en la que ha mostrado su sobriedad ante un Rosberg inquieto, dubitativo y fallón en Q3. Carlos Sainz ha sido 16º y Alonso, que apenas dio un par de vueltas, último con el objetivo de guardar neumáticos por su sanción.
Ha sido ponerse líder del Mundial y volver los nervios. Nico Rosberg ha regresado a la 'oscuridad' de los subcampeonatos en una clasificación de Malasia en la que Lewis Hamilton ha sacado de nuevo su martillo. El británico se ha hecho con la pole en Sepang con una completa superioridad sobre su compañero para avisarle de que no, de que la temporada aún no ha terminado.
De que él está ahí sí o sí. Y de que si tiene que hacerlo no tiene ningún problema en sacar lo mejor de sí mismo. Seguro, con determinación. Sin vacilación y sin mostrar un solo síntoma de debilidad. Así fue la actuación de Lewis Hamilton en la clasificación. Siempre mandando. Siempre liderando. Siempre teniendo bien cogido el tono de una complicada pista en la que cualquier fallo se paga caro. En la que Rosberg pagó sus pecados.
Pagó cada falta en la Q3. Y pudo haber sido mucho peor porque aún con sus tres errores, uno en su primer intento y dos en el segundo, pudo colocarse en primera línea de la parrilla tras Lewis Hamilton. No se le vio con confianza, quizá de nuevo sufriendo ese mal de altura que ha acusado estos años. Quizá porque no es lo mismo llegar que mantenerse, no es lo mismo ser primero que acabar ganando. Quizá por eso, Nico falló. Sus fallos facilitaron la pole de Hamilton, y también pudieron haber hecho que Verstappen o Ricciardo se metieran en medio de los dos Mercedes.
McLaren-Honda mira para arriba
No fue ni mucho menos una buena jornada para los españoles, pero todo puede cambiar para mejorar. Alonso ha 'tirado' directamente la clasificación, pensando única y exclusivamente en la estrategia para una carrera en la que sí o sí iba a haber arrancado último. Sí, otra vez, otra penalización. Una imposible de superar por mejor que lo hubiera hecho en esta jornada de sábado. El asturiano apenas ha dado un par de vueltas, las justas y necesarias para cumplir con el 107%. Y para guardar neumáticos.
Esa era su idea. Guardar gomas. Hacer una estrategia diferente de cara a la carrera y rascar puntos. Dependerá del resto, sin duda, pero lo cierto es que este McLaren-Honda empieza a coger color. Jenson Button, sin la evolución del nuevo motor nipón que estará ya disponible en el GP de Japón, ha hecho una gran clasificación, llegando a rodar a solo 1.3 de Mercedes en Q2. Al final, noveno, por delante de un Williams. Algo impensable hace unos meses.
Y mientras el McLaren-Honda avanza, el Toro Rosso va hacia atrás. La opción Renault, siempre rumoreada como futuro de Carlos Sainz, empieza a no ser algo a evitar en el largo plazo viendo cómo evoluciona el monoplaza de Faenza a lo largo de la temporada. No había apenas ritmo en Sepang, pasó a Q2 por los pelos y nunca dio sensación de poder colarse entre los diez primeros salvo milagro del madrileño.
El Mundial, en plata
Imprevisible carrera la que se va a vivir en Malasia, con múltiples opciones y múltiples acciones posibles para cada piloto, para cada equipo y para cada mente pensante en el otro lado del muro. La lucha entre los dos Mercedes sigue su curso, con la única posibilidad de sorpresa de Red Bull o Ferrari. La lucha por los puntos es otra cosa. Todo puede pasar en Sepang.
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