Vettel consigue la pole en Rusia en una primera línea de Ferrari con Sainz 14º y Alonso 15º

Ferrari ha vuelto. Sin ninguna duda, Ferrari ha vuelto. La legendaria escudería, la más grande la F1, el equipo con más historia de este deporte, está por fin de regreso. Después de temporadas en el alambre, después de años sufriendo, después de múltiples decepciones y muy pocas alegrías, ya están listos para volver a ganar un Mundial. Dos victorias en tres carreras, y en la cuarta por fin una pole. Sebastian Vettel ha sido el más rápido en la clasificación de Rusia en una primera línea roja gracias a Raikkonen, dejando a Mercedes en segundo plano con Bottas 3º y Hamilton 4º.

Cómo gritaba Sebastian por radio. Gritaba de alegría claro está, pues 2016 fue duro y a pesar de que 2015 fue mejor en esta ocasión saben y son conscientes de que están al mismo nivel o incluso por encima de Mercedes. Correctivo el que se están llevando los plateados, que ya ni tan siquiera pueden exhibir su hasta ahora desmesurado poder en clasificación, territorio que salvo avería era suyo siempre.

Y es que no sólo han caído en la pole, sino que tampoco están en primera línea. Kimi Raikkonen ha ejercido de campeón mundial en Rusia, y se ha quedado a las puertas de una pole que no logra desde Francia 2008. Ha estado cerca, tan cerca que ha hecho imposible para Bottas y para Hamilton poder superar su crono. Valtteri y Lewis van a tener que sudar mucho este curso para ganarse las victorias, y es que la alfombra plateada de estos tres pasados campeonatos ya tiene cierto color rojo Ferrari.

Alonso y Sainz, K.O. en la Q2

Ninguno de los 'nuestros' pudo estar ahí arriba este sábado, y es que tanto Fernando Alonso como Carlos Sainz cayeron en Q2. Lo del asturiano era más previsible, pues ya pasó por los pelos la Q1 y el McLaren-Honda no da para más. A pesar de acabar feliz la primera ronda, tras su eliminación en la segunda dejó en su radio un "increíble, realmente increíble", que denota la más que normal y obvia frustración de un campeón por un monoplaza que no da para más.

Fue el último de todos los participantes de Q2, demostrando que el MCL32 es lo que es. Apenas tres segundos separaron a su monoplaza del Mercedes de Bottas en esa ronda, algo que es intolerable para dos marcas como McLaren y como Honda. La vida sigue igual para Alonso, porque la vida sigue siendo exactamente igual para su maltrecha escudería. El paso de las carreras no hace más que acrecentar sus problemas.

Carlos Sainz al menos tiene más esperanzas en el horizonte. El madrileño se quedó a las puertas de la Q3, con un 11º crono por poco, por muy poco. El problema para él son los tres puestos de sanción que lleva desde Baréin por la polémica con Stroll y que harán que salga 14º. Justo por delante de Fernando Alonso, aunque su Toro Rosso tiene mucho más nivel que el MCL32 en estos momentos.

Ferrari, a dar un golpe sobre la mesa

Ya tan solo queda lo más importante del fin de semana. La carrera de Sochi dictará sentencia, una que puede dejar en muy buen lugar a los de Maranello tras años deambulando sin rumbo. Sebastian Vettel sale primero, y Kimi Raikkonen segundo, los dos mirando por los retrovisores a Bottas y a Hamilton y a sus hasta este curso todopoderosos Mercedes. Rusia puede ser un buen lugar para confirmar la revolución roja de Ferrari.