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LA DISTANCIA DE ROSBERG EN EL MUNDIAL SE REDUCE A UN PUNTO
Hamilton gana el GP de Gran Bretaña con Sainz octavo y Alonso 13º
Silverstone no ha faltado a su cita con la emoción y la tensión en una nueva carrera de F1. Lewis Hamilton, indiscutible líder en su casa, se ha hecho con la victoria en Gran Bretaña por delante de Verstappen y de Rosberg tras la sanción de diez segundos a Nico. Sainz logra unos buenos puntos con su octava plaza, mientras Alonso ha quedado 13º en gran parte por un trompo que le llevó a visitar la tierra inglesa.
Qué ganas tenía Hamilton. Qué ganas que tenía de agradar a su público, a su afición. De sumar una victoria, una impecable victoria sin nada que decir y sin polémicas después de lo sucedido en Austria. Se vio en el podio, podio que lideró con un triunfo brillante, pero ya se veía también desde esas primeras vueltas en las que incluso estuvo a punto de tocarse con el safety car. Qué ganas tenía Hamilton, y qué ganas tiene de volver a liderar un Mundial que ya tiene a tiro de un punto.
Porque Lewis ha vuelto. Porque el tricampeón, que parecía no estar en las primeras pruebas, está de nuevo con nosotros. El británico, con la moral altísima y con una autoestima a prueba de Rosberg, ha vuelto a hacer un fin de semana perfecto en el que pocos fallos se le pueden ver. Uno de esos de maestría en el volante y de liderazgo total. Uno que distingue a los buenos pilotos de los mejores, y a los mejores de los que terminarán siendo recordados como leyendas de este deporte.
Y es que no era ni mucho menos sencillo, porque el cielo decidió que quería jugar parte fundamental. Sí, se sabía que iba a llover, pero no que caería tantísimo agua y menos antes de empezar la prueba. Con el safety car 'liderando' unas vueltas, luego tocó el turno de las mentes pensantes. De la experiencia. De los pilotos. Agua extrema, intermedios... y finalmente de seco con los medios. Carrera cambiante, de las que hay que controlar para no tener 'aquaplanning' y ver todo tu trabajo en la tierra.
Hamilton se libró de todo eso. Hamilton decidió todo cuando lo tenía que hacer y lo hizo perfecto. Perfecto como Verstappen, tercero a la entrada por meta pero segundo al final. Rosberg, plata en principio, recibió una penalización de diez segundos y tiene que 'conformarse' con la medalla de bronce de Silverstone. Tres puntos menos para el alemán en un Mundial en el que todo parece va a estar bastante apretado.
Alonso no; Sainz sí
En el que todos los puntos cuentan. Los que se logran y los que no. Alonso ha vuelto a quedarse a cero. Otra vez. Y eso que el McLaren-Honda sí se mostró competitivo en muchos duelos, en especial cuando tuvo que verse las caras contra Force India y contra Williams. El agua vino bien al motor Honda, pero no vino tan bien cuando Fernando hizo un 'aquaplanning' que acabó con su monoplaza en la tierra. Pudo volver, pero sin opciones ya de acabar entre los diez primeros.
Sainz sí lo consiguió, incluso superando a un Sebastian Vettel que está teniendo una temporada para olvidar, o para recordar y poner las piezas en su sitio para que no suceda de nuevo. El madrileño estuvo serio en todo momento, pero un trompo justo cuando pasó a Raikkonen le dejó sin un mayor premio. Con todo, otra vez por delante de su compañero de equipo. Y otra vez se demuestra que si no hay problemas mecánicos Carlos está ahí.
Hamilton tiene a tiro el liderato
Gran carrera la disputada sobre la mítica pista de Silverstone. Una que ya queda atrás y que deja por delante el final de la primera parte de la temporada, con Hungría y Alemania a la vista, y el comienzo de las vacaciones de verano. Cincuenta puntos quedan hasta el parón estival, 50 que pueden dejar a Lewis Hamilton como líder de sumar dos triunfos en las dos pruebas restantes del mes de julio.
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