Los termómetros han alcanzado los 32 grados
Así amanecía hoy Las Palmas de Gran Canaria, una ciudad envuelta en una densa neblina, como si fuera Londres. Pocos se han resistido a capturar esta mañana este fenómeno tan poco frecuente, antes de que desapareciera y que tiene que ver con la calima. Las partículas de polvo en suspensión provocan que el agua de la atmósfera se condense durante la noche y este es el efecto que provoca esa condensación. Eso sí desaparece con los primeros rayos de sol.
Es la situación que vamos a tener durante los próximos días, se unen tres fenómenos, niebla, calor y calima. Ayer en Tenerife, casi no se veía el Teide, hoy desde el mismo sitio, el paisaje es algo distinto.
Así amanecía Santa Cruz de Tenerife hoy. Es el sol y sin filtros, especialmente amarillo porque la calima está más cerca de la costa. Una calima que nos va a seguir acompañando dos días más y lo peor, según los meteorólogos, está por llegar.
La calima comenzó a notarse desde ayer en medianías pero desde esta mañana ha bajado a cotas más bajas. Esta es la evolución de la nube de polvo sahariano.
Tres días difíciles especialmente para las personas enfermas.
Y como ella muchas personas que ayer acudían a las urgencias aquejadas por problemas respiratorios. Se debe a que la atmósfera está sucia, llena de partículas en suspensión, que provocan otro fenómeno muy curioso. No, no es Londres, es el puerto de la Luz en Las Palmas de Gran Canaria, que despertaba cubierto de una densa niebla. Esta es la explicación de este amanecer tan poco habitual.
Para los que no tuvieron tiempo de captar ese momento, esta tarde, al anochecer, volverá a producirse y mañana y quizás también el sábado, mientras el polvo africano siga sobre las islas.
