Su perro o su gato pueden estar afectados por la Dirofilariosis, o lo que es lo mismo, pueden tener gusanos en el corazón o los pulmones que pueden llegar a matarlos. Es un parásito que se transmite de unos animales a otros con la picadura del mosquito y que tradicionalmente ha tenido una alta incidencia en Canarias. La mejor arma, la prevención, ha conseguido bajar mucho los casos en Canarias. Sigue habiendo alta incidencia en los podencos canarios por sus condiciones de vida. Y falta concienciar a los dueños de gatos y de hurones, que también pueden sufrir la enfermedad. En humanos el gusano tiene más difícil sobrevivir. Lo peligroso es un diagnóstico erróneo. El éxito en la lucha contra el gusano del corazón en Canarias ha traído hasta aquí a 200 especialistas y expertos en la enfermedad de todo el mundo. En un simposio en Las Palmas de Gran Canaria ponen en común los últimos avances contra este parásito.