A penas podía mantenerse de pie sin embargo paseaba tranquilamente empujando un carrito, en su interior un bebé de tan sólo dos meses. Los viandantes que paseaban por la celle de La Noria no dudaron en alertar a los servicios de emergencia temían que al recién nacido le pudiera ocurrir un percance estando al cuidado de su progenitora. Los agentes la encontraron en compañía de un hombre ambos con evidentes síntomas de embriaguez. En esta populosa calle santacrucera los vecinos y viandantes se muestran sorprendidos ante un hecho semejante. Unos hechos que han sido trasladados a Fiscalía de Menores para que se realizaran las actuaciones convenientes.