Ya lo anuncian los más pequeños. Ha llegado el Carnaval y son los encargados de inaugurarlo. Llevan todo un año preparándose para interpretar sus canciones y lucir sus disfraces. Detrás del escenario. Muchos nervios y madres que hasta se saben las letras.
Darse los últimos retoques y demostrar que en sus voces está el futuro.
Critican lo que les preocupa: La educación… o los juguetes, mientras reciben el calor de la grada.
Mucho esfuerzo pero al final, lo más importante, que no deja de ser un juego de niños.