San Andrés ha vuelto ha sufrir los embates del mar, la maltrecha escollera que protege al pueblo no fue capaz de frenar las olas y la fuerza del agua arrancó árboles y levantó las aceras. Una imagen que se repite varias veces al año y que acaban pagando muy caro los comercios y restaurantes de primera línea.La asociación de comerciantes asegura que los daños sobrepasan los 10.000 €, reforzar la escollera, afirman, sería más barato.Un tema que ha interesado incluso al ex ministro Caldera que después de comer en uno de los restaurantes afectados ha planteado su propia solución.Una actuación que está paralizada porque no hay acuerdo entre las administraciones así que de momento no hay no hay quién pare las olas.