Más de 700 mesas
Seguimos en Santa Cruz porque, un año más, el Baile de Magos congregó a miles personas. La fiesta llenó de color las calles más antiguas de la ciudad. Es que es uno de los actos más populares de las fiestas, que se celebraba en torno a 700 mesas. Mucho vino y comida, para un baile donde la música sonó hasta altas horas de la noche.
Las parrandas se arrancan a cantar desde primera hora de la noche...los magos siguen llegando a las calles con más solera de la ciudad mientras que en las mesas comienza a correr las viandas más típicas de las islas, carnes, pescados, dulces...Todas regadas con grandes caldos canarios.
No falta el zurrón del gofio que debe ser amasado con suma paciencia. NI tampoco el escaldón. La buena compañía y la agradable conversación alargan la fiesta. Una noche en la que la ciudad nos muestra su lado más tradicional en donde diferentes generaciones de una familia se reúnen alrededor de una mesa. Una fiesta que llama la atención a los que vienen de fuera y que nos evoca una época no tan lejana en Santa Cruz.
