De alcalde a presidente de todos los canarios, Fernando Clavijo ha cumplido ya cien días al frente del Gobierno de Canarias y en este tiempo a pesar de su talente predispuesto al diálogo, ya ha tenido algún que otro conflicto, sobre todo, con el Presidente del Cabildo de Gran Canaria. Asegura Clavijo que Morales dispara antes de hablar. Sobre el pacto con el Psoe, dice que será durardero. Con quien ha hecho otro pacto, dice, es con su familia, aunque sólo para los próximos cuatro años. Hemos pasado un día con el presidente. Un día que empezó a las 7 de la mañana, haciendo deporte.
Aún no ha amanecido y el presidente de gobierno de Canarias se calza las zapatillas para empezar a correr, siempre con música.
En el apartamento de presidencia se prepara él mismo el desayuno.
Así que té solo, pan y, a veces pavo y queso. Sano y ligero. Fernando Clavijo se relaja y nos cuenta que en estos 100 días como presidente coge muchos más aviones y duerme poco en casa. Además le reconocen por la calle.
En el desayuno Fernando Clavijo se prepara para lidiar con los temas de cada jornada. Como los roces con el cabildo de gran canaria, por la carretera de la aldea.
Discrepancias que Clavijo intenta solucionar con su buen talante. Con su inseparable mochila, sale a su primer acto oficial.
Descubre la placa y en su discurso habla de cómo dignificar la FP. Al terminar, el lapsus de quien lleva poco tiempo en el cargo.
Y durante a la visita al centro, una pregunta indiscreta...
Pero sí lo tiene. Aprovecha los viajes en coche para comunicarse a través del movil. Y luego no para. Reunión con la vicepresidenta...., consejo de gobierno, reunión con la directiva de la federación de municipios, atiende a los medios... almuerzo cerca del despacho junto a su equipo y... vuelta a las reuniones... ahora toca con los alcaldes.
Encuentros a los que ha asistido el consejero de economía, en este caso de Coalición Canaria. Pero Clavijo, recordemos, pactó con el Partido Socialista con quien gobierna. Un pacto que a veces suelta chispas.
Pero está convencido que habrá pacto para rato.
Todo lo afronta con una sonrisa.
Termina esta extensa jornada de trabajo. Hoy duerme en Tenerife, hay que coger otro avión, pero al menos 4 noches a la semana está alejado de su mujer y sus dos hijas.
El presidente del Gobierno de Canarias pasa por el control de seguridad como todo el mundo, pese a que podría no hacerlo. Porque dice quiere manterse fiel a su lema más calle y menos despacho, en resumen transparencia y cercanía.
