En Osorio hay un área libre de todo tipo de ruidos. Las 5 parejas de paloma rabiche que viven en esta finca son asustadizas.Miguel es quien se encarga de cuidar a estas palomas ancestrales. Las más primitivas de esta zona del mundo. Las han traído de La Palma, para repoblar Gran Canaria. Ejemplares los hay en toda la provincia occidental. De momento en Gran Canaria viven en cautividad, y eso conlleva un riesgo: que no den calor a sus huevos. Ahí es donde juegan un papel decisivo las tórtolas. Que hacen de madre de alquiler. Cuando rompan el cascarón, al igual que otros 6 polluelos que ya han nacido, serán soltados e n el parque rural de Doramas. Allí, observar a la paloma rabiche en libertad, será como viajar al pasado.