La via litoral de Santa Cruz de Tenerife, la cuarta fase de la circunvalación de las palmas de gran canaria o el cierre del anillo insular de Tenerife son algunas de las obras públicas que peligran tras el drástico recorte estatal para las islas. En el convenio de carreteras, se esperaban más de 200 millones y solo llegarán algo más de 60, de los que ya se ha comprometido buena parte.
El gobierno autónomo reclamará al ministerio de fomento que recosidere ese recorte. Creen que compromete muchas obras ya en curso y retrasará el pago de las ya terminadas. Hay que priorizar.
Los perjudicados no sólo serán los usuarios. También las empresas constructoras.
No solo se recorta en carreteras. Los presupuestos estatales también dejan a Canarias sin 40 millones para obras en colegios y 50 en infraestructuras turísticas.