Según ha explicado a los medios el codirector del Sistema Atapuerca, Juan Luis Arsuaga, y recoge EFE, se trata de la mitad izquierda de un cráneo del cual ya teníamos la parte derecha, que "pertenece a una chica de unos 13 años que los investigadores han llamado Sara".
En concreto, se trata del maxilar izquierdo, el segundo molar, el pómulo y la zona de la oreja, todos ellos encontrados en la misma zona de la Sima de los Huesos donde con anterioridad hallaron la parte derecha de este cráneo. "Con todas las piezas encontradas a lo largo de los últimos años reconstruiremos a Sara para que, quizá algún día, tenga una segunda vida en el Museo de la Evolución Humana", ha señalado Arsuaga, quien ha añadido que el objetivo también será el de estudiar la causa de la muerte.
La campaña de excavaciones de este 2018 también ha dejado otros resultados importantes como la finalización de los trabajos, después de más de veinte años, en el nivel TD10 de Gran Dolina, una cueva en la que se han tomado las coordenadas de más de 97.000 restos fauníticos y 37.000 restos de piedra.
Con esta finalización, ha relatado por su parte José María Bermúdez De Castro, codirector de los yacimientos, se ha puesto al descubierto el nivel TD9 y a partir del año que viene comenzarán los trabajos en un tramo de la sucesión estratigráfica que "no serán tan productivos desde el punto de vista arqueológico", ya que en los niveles TD8 y TD7 no se ha documentado presencia humana, hasta alcanzar al esperado TD6, donde se espera llegar en cuatro años.
En ese nivel TD6 es donde, según las estimaciones de los codirectores de Atapuerca, se encuentra el Homo Antecessor, por lo que, ha subrayado Bermúdez de Castro, "tendremos oportunidad de revisitar y ampliar nuestro conocimiento sobre una de las joyas" de los yacimientos.
En cuanto al resto de yacimientos, cabe destacar también la recuperación de diferentes restos de animales en el nivel 7 de lSima del Elefante, en concreto especies como el pigargo y el castro que apuntan a la existencia de un ambiente húmedo en la Sierra hace 1,3 millones de años.
También se han realizado las primeras prospecciones en La Paredeja, una nueva cueva cortada por una cantera localizada en Ibeas de Juarros (Burgos), donde se han identificado herramientas de piedra fabricadas con sílex y cuarcita, así como algún resto de fauna en los niveles inferiores, lo que lleva a pensar, a falta de estudios más intensivos, que se trata de un asentamiento ocupado durante el periodo paleolítico medio (150-300 mil años).
En Cueva Fantasma, donde la Junta de Castilla y León está construyendo desde el pasado año una nueva cubierta, se han encontrado numerosos restos fechados durante el pleistoceno superior, es decir de una antigüedad de unos 50.000 años. A este balance de la Campaña de 2018 ha acudido la consejera de Cultura de la Junta de Castilla y León, María Josefa García Cirac, quien ha puesto en valor el "éxito y la importancia de los hallazgos en las excavaciones por el interés que despiertan todos ellos".
García Cirac ha asegurado que el "potencial de los trabajos sigue siendo elevado a pesar de que hace cuarenta años que se iniciaron las excavaciones", y ha cifrado en 340.000 restos arqueológicos y paleontológicos recuperados a lo largo de las campañas. Por último, la consejera ha destacado el hecho de que se hayan cumplido los objetivos marcados a mediados del mes de junio, como la finalización de los trabajos en el nivel TD10 de Gran Dolina o el nuevo frente iniciado en La Paredeja, y seguir aumentando las expectativas de documentar la ocupación Neanderthal.