Cuántas ves hemos sufrido los desplantes de una persona impuntual. Lo curioso es que por más que advirtamos a estas personas de lo molesto que es invertir nuestro tiempo esperando su llegada éstas no suelen cambiar.
Un estudio de la Universidad de San Diego explica por qué las personas impuntuales llegan tarde y por qué la impuntualidad afecta más a unas personas que a otras. La investigación establece que hay dos clases de personas, las que perciben el tiempo con una capacidad normal y quienes perciben el tiempo de forma más lenta.
Los psicólogos suscriben esta teoría y determinan que en realidad las personas impuntuales creen que pueden hacer más cosas de las que realmente pueden hacer con el tiempo que disponen. Se trata del fenómeno determinado como 'falacia de la planificación'. Y consiste en que las personas perciben el tiempo que emplean en determinadas tareas más breve de lo que es en realidad. Así, creen que esas tareas les llevarán mucho menos tiempo del que en realidad tendrán que emplear.
En el estudio se evaluó la percepción del tiempo de los individios. Primero se separó a los puntuales de los impuntuales y se les pidió que midieran mentalmente el tiempo en el que transcurría un minuto. ¿Los resultados?. Aquellos que decían ser puntuales tenían una percepción casi exacta del tiempo mientras que los que confesaban ser impuntuales habían calculado el minuto sobrepasando mentalmente los 77 segundos.