Detectar el cáncer de mama con una prueba de orina y sin salir de casa.
Es el proyecto de una ingeniera biomédica española, Judit Giró, que ha ganado un prestigioso premio internacional, el Dyson Award 2020, gracias a su proyecto The Blue Box.
Con 24 años, Judit Giró ha desarrollado una idea que evitará al paciente dolor o someterse a radiaciones para conocer su diagnóstico.
Nos cuenta que "había un perro capaz de oler el aliento de la boca de los pacientes y ladraba cuando la persona tenía cáncer".
Se trata de unos sensores químicos que reaccionan de forma distinta según ciertos compuestos químicos están o no en la orina.
'The Blue Box' es un dispositivo biomédico para hacer más asequibles y menos invasivas las pruebas que detectan el cáncer de mama.
El trabajo de Giró va a permitir, en un futuro, que una mujer desde su casa pueda realizarse una prueba de cáncer de mama sin necesidad de radiación y dolor, a través de una muestra de orina y mediante la tecnología de Inteligencia Artificial (IA).
El dispositivo realiza un análisis químico de la muestra de orina y envía los resultados a la nube, donde se ejecuta el algoritmo basado en IA.
Esto conduce a un diagnóstico, que se comunica a través de una aplicación. Este sistema permite a la usuaria consultar en el teléfono móvil sus resultados en tiempo real y guardar el historial de las pruebas realizadas, como señalan desde Dyson en un documento.