Extraterrestres
Las ondas extraterrestres detectadas en una misión de la NASA que rompen con nuestra percepción del espacio
Las ondas de coro registradas provienen de una región del espacio ubicada a más de 160.000 kilómetros de nuestro planeta.
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Investigadores de la universidad china de Beihang, con la colaboración de la NASA, han captado ondas sonoras de coro de procedencia extraterrestre provenientes de una región del espacio ubicada a más de 160.000 kilómetros de nuestro planeta. Este descubrimiento ha desafiado las teorías existentes acerca de la generación de este tipo de emisiones electromagnéticas.
Según el artículo publicado en la revista científica Nature este jueves 23 de enero, este hallazgo conlleva un avance significativo en el entendimiento del espacio y el clima espacial. El equipo de científicos encargados de este descubrimiento está compuesto por expertos estadounidenses, chinos y suecos.
Las ondas coro de tono ascendente, descritas por los investigadores como el canto de las aves o de las ballenas, son fluctuaciones electromagnéticas de alta intensidad que interactúan con electrones y campos magnéticos en el plasma.
¿Cómo se pueden escuchar cantos de pájaros en el espacio?
A pesar de que no existan pájaros en el espacio, el sonido extraído en la investigación es similar al canto de estas aves. Pero, ¿Cómo es esto posible?
Las ráfagas de plasma, similar a las ondas coro, se ondulan a la misma frecuencia que la audición humana y, al convertirse en señales auditivas, las notas más altas se asemejan a los cantos agudos de los pájaros.
No es la primera vez que se detectan en el espacio estas ondas, pero si es la única ocasión en la que su procedencia es tan lejana. Es más, los investigadores las descubrieron inesperadamente, ya que no esperaban detectar este fenómeno en una región del espacio donde el campo magnético de la Tierra está extendido.
Características de las ondas
Las ráfagas electromagnéticas tuvieron una duración estimada de 0,1 segundos, mientras que su frecuencia fue de casi 100 hercios por segundo.
Los astrónomos desconocen el origen
A día de hoy, los astrónomos todavía desconocen la forma en la que se originan estas ondas y, hasta el momento, se pensaba que estaban moldeadas por el campo magnético que generan los planetas entre sus polos.
Los científicos llegaron a esta conclusión debido a que el sonido suele originarse cerca de los polos. Por ejemplo, en el caso de la Tierra, las ondas tienen lugar a 51.000 kilómetros sobre su superficie.
Sin embargo, este nuevo hallazgo demuestra que estábamos equivocados, ya que estas ondas provienen del espacio profundo, demostrando que pueden originarse mucho más lejos de lo que pensábamos.
Otras ondas de coro registradas
En la década de 1960, mientras se realizaban investigaciones en la Antártida, los dispositivos radiofónicos y los receptores registraron estas ráfagas electromagnéticas.
En el 2012, dos aeronaves de la NASA, que estaban estudiando los cinturones de radiación de Van Allen que rodean la Tierra, captaron los chirridos de los cinturones de radiación de nuestro planeta.
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