Para 2050 la producción de carne tendrá que crecer un 50%. "Teniendo en cuenta que ya se usa un tercio de los cultivos para la producción de comida para animales, es lógico que se busquen fuentes alternativas de alimentos y de cultivo." Así es como justifica este invento Katharina Unger, diseñadora industrial austrica e inventora de la 'granja de larvas'.
Katharina, ex estudiante de la University of Applied Arts de Viena, ha creado la Farm 432, una 'granja de larvas' que permite obtener grandes cantidades de proteinas sin necesidad de adquirir carne animal y sin salir de casa.
Este 'electrodoméstico' permite obtener 2,4 kilos de proteina de larvas con tan sólo 1 gramo de huevos de mosca soldado negra (Hermetia illucens) tras esperar 432 horas, o lo que es lo mismo 18 días, una fuente prácticamente ilimitada de insectos. En su página web, la creadora afirma que se pueden obtener hasta 500 gramos por semana, lo que equivale a dos comidas.
Además, la cosecha se hace sola sin que tengamos que mediar en ella y nuestra proteína queda recogida en un recipiente. Esta granja ofrece una alternativa sostenible para la creación de alimentos. El recipiente mantiene la temperatura constante, dentro se colocan los huevos y cuando estos eclosionen tendrán un espacio donde vivir, alimentarse y reproducirse, depositando los huevos en una cavidad preparada para ello donde las nuevas larvas reptaran hasta caer en un depósito.
Estas moscas no comen, ya que se alimentan de residuos biológicos, por lo que los gastos se limitan a agua y CO2. Es por ello que las larvas de mosca soldado negra son uno de los productores de proteínas más eficientes. Contienen hasta un 42% de proteína y una gran cantidad de calcio y aminoácidos.
