Investigadores de la Universidad de Lund, en Suecia, han obtenido una imagen detallada del sistema visual de una vieira: una organización sofisticada de hasta 200 ojos que dicen que es sorprendentemente similar a un telescopio reflector.
Igual que la óptica compleja de otros animales, como las langostas, ha aportado información para el diseño del telescopio, estos resultados pueden allanar el camino a la construcción de novedosos dispositivos ópticos de inspiración biológica para aplicaciones de imágenes y detección.
La mayoría de los animales usan lentes para enfocar la luz sobre su retina, una capa de tejido sensible a la luz que recubre la parte interna del ojo, aunque ciertos organismos marinos (incluida la vieira de Pecten) han adoptado espejos para crear imágenes.
El autor principal de este trabajo, Benjamin Palmer, de la Universidad de Lund, y sus colegas investigaron la compleja organización de espejo de la vieira. Usando varios enfoques de imágenes microscópicas, los científicos descubrieron que la visión espacial en la vieira se logra a través de la estructura en capas de espejos ubicada en la parte posterior de cada ojo, que se ajusta para reflejar las longitudes de onda de luz que penetran en su hábitat.
Además, el espejo está revestido con un mosaico de cristales de forma cuadrada, minimizando los defectos superficiales para obtener una imagen más clara. El espejo forma imágenes en una retina de doble capa para representar por separado los campos de visión periféricos y centrales.
Palmer y sus colegas tuvieron en cuenta que su trabajo demuestra el notable control que ejerce la vieira sobre el crecimiento y la disposición de los cristales para crear un espejo altamente reflectante capaz de formar imágenes funcionales.
