Gritos, insultos y empujones entre aficionados y antitaurinos por la corrida de toros de anoche en Gandia. Mientras 4.000 personas llenaban el coso portátil, más de 400 manifestantes se agolpaban a sus puertas en protesta por la celebración taurina.
La tensión llegó a tal punto, que la policía tuvo que formar una barrera para impedir que los manifestantes irrumpieran en la plaza.
En el enfrentamiento una persona resultó herida con una brecha en la cabeza, ocasionada por un aficionado pro-taurino, según la organización de la protesta.
Hacía 25 años que no se veían toros en la localidad y la decisión del gobierno local de recuperarlas desató la controversia.