José Mercé ha sabido combinar modernidad y tradición en un arte que llega ya a todos los rincones. El último de sus espectáculos llega la semana que viene a uno de los principales templos de la música clásica en nuestro país, el Auditorio Nacional.
Mientras, sus palmas y su voz sonaban este martes en un escenario reservado habitualmente a gargantas que no rompen en quejíos. Los flamencos no suelen entrar aquí, en la sala sinfónica del auditorio donde el sonido fluye como en pocos sitios lo hace.
Cantar aquí es, para Mercé "un sueño cumplido", pero tiene más. Entre ellos, presentar su próximo disco en Nueva York y un deseo de madridista, dar un concierto en el estadio Santiago Bernabéu.
Se ha atrevido con casi todo, como la versión de 'Mammy blue'. Pero está convencido de que hay que abrir las puertas del flamenco, sobre todo para que entren los espectadores del futuro
El Auditorio Nacional abre sus puertas al flamenco el próximo jueves.