'La bailarina de Auschwitz' es un libro lleno de enseñanzas auténticas, basadas en la experiencia singular de Edith Eger, en un largo camino de curación y en el aprendizaje de una vida que ahora se acerca a los noventa años. Este libro, como ha dicho el premio Nobel de la Paz Desmond Tutu,
es un regalo para la humanidad.
Edith Eger, la autora de este libro, pasó cerca de año y medio en aquel campo de exterminio siendo adolescente y consiguió sobrevivir. En la novela ofrece una respuesta afirmativa y positiva, asegura que es posible rehacer la propia vida después del que probablemente sea el mayor horror concebido y llevado a cabo por el hombre. Es posible superar el trauma, curarse y ayudar a otros a hacerlo.
En 'La bailarina de Auschwitz' narra en primera persona su peripecia, desde la experiencia del campo de exterminio a su trabajo profesional como psicóloga, ofreciendo las claves para enfrentarse a los traumas, problemas e inseguridades de la vida. Una verdadera historia de superación tras el descenso a los infiernos.
Esta novela puede ser leída como un libro de autoayuda, lo es en cierto modo, pero basado en hechos reales y concretos; es, antes que nada, la autoayuda que se prestó la autora.
"La libertad reside en aceptar lo sucedido", escribe en un libro lleno de enseñanzas. Una de ellas es que el sufrimiento es universal, pero el victimismo es opcional. "Nadie puede convertirnos en víctima excepto nosotros mismos. Nos convertimos en víctimas, no por lo que nos sucede, sino porque decidimos aferrarnos a nuestra victimización. Desarrollamos una mentalidad de víctima; una forma de pensar y de ser rígida, culpabilizadora, pesimista, atrapada en el pasado".