Charles Chaplin, ha sido un icono fundamental del S.XX. Nació en un campamento gitano donde reina la miseria y pese a las circunstancias familiares que lo rodean, su padre alchólico y su madre esquizofrénica, desde muy pequeño le inculcan el amor por la pantomina.
Tiene un debut cinematográfico muy temprano, pero hasta que llega a Hollywood no se aprecia su talento. En la meca del cine llega a participar en 35 cortometrajes por año y su consagración definitiva llega de la mano de 'El Chico' en 1921. Con sus logros profesionales, Chaplin llegó a convertirse en su personaje de Charlot que aún hoy sigue calando en la pequeña ciudad india de Adipur.
Esta veneración se debe en parte a Aswani, un hombre que tras ser despedido de su trabajo en 1973 crea un club en honor a Charlot y desde entonces esta pequeña localidad venera al vagabundo del bombín y el mostacho.