Se cumplen 150 años del nacimiento de Antonio Palacios, el arquitecto que intentó transformar España

La personalidad de una ciudad reside en su urbanismo y en el caso de Madrid, uno de los principales responsables se llama Antonio Palacios. "Modernizó mucho la arquitectura española sobre todo también por la incorporación de todo lo que son las artes aplicadas, la cerámica, la pintura, la escultura.... de lo que son los canteros, de los vidrieros", afirma Jacobo Armero, comisario de la exposición permanente que desde ahora se puede visitar en el Ayuntamiento de Madrid.

Nacido en Porriño, Palacios conoció ya en su infancia el trabajo de los canteros gallegos

"Su padre trabajaba en las obras del ferrocarril, en Galicia, allí ya estuvo en contacto con todo el mundo de la piedra, de las canteras", añade Armero. El comisario y también arquitecto nos muestra las entrañas de uno de sus edificios más emblemáticos: el Palacio de Telecomunicaciones. "Esta era la escalera por la que accedía el personal del Palacio de Telecomunicaciones. Vemos como Palacios cuidaba el entorno y los espacios para los trabajadores", nos explica ante unos azulejos que fueron encargados en una de las fábricas más selectas de Sevilla en los años veinte del pasado siglo.

Cada uno de sus edificios es una solución única para cada finalidad y cada localización

Influido por lo que había visto en París, Viena o Chicago, la obsesión de Antonio Palacios era modernizar una España traumatizada por el desastre de 1898. A través de sus edificios lo que intentaba demostrar era que España no era tan diferente. "Realmente son edificios que hacen la historia de una ciudad", nos comenta Maxi, turista de León. "Hay poco, hay poca información con respecto sobre Antonio Palacios, y yo creo que sería muy bonito reivindicar su figura", afirma, María, otra visitante.

Fascinado por lo que se hacía en Viena o en Chicago, Palacios intentó importar ese viento fresco a una España desmoralizada

El abanico de tipo de obras de Palacios es inabarcable: hospitales, centros comerciales, viviendas, bancos. Pero, además de todo eso fue el encargado de diseñar las primeras estaciones de un medio de transporte revolucionario en ese momento. "Darle muchísima darle muchísima luz natural, el uso del azulejo blanco para que la luz, el uso de tragaluces para que entrase la luz natural", concluye Armero. Palacios muere a los 71 años de edad, en 1945, sin que muchos proyectos de este trabajador incansable, acabaran viendo la luz. El diseño de las primeras estaciones y del logotipo del Metro de Madrid están también entre sus proyectos.

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