El Teatro Real alberga este viernes la ópera 'Dead man walking', una obra inspirada en el relato de Sister Helen sobre su experiencia con un condenado en el corredor de la muerte y que fue llevada al cine por Tim Robbins y Susan Sarandon en la película 'Pena de muerte'.
"Trabajar en esta ópera me cambió la vida y mi percepción sobre este arte, porque no se trata solo de un modo de entretenimiento sino de un modo de curación", confesó el barítono Michael Mayes durante la presentación de la obra, quien da vida en la obra al asesino Joseph de Rocher.
El argumento de la ópera narra el acercamiento de Helen Prejean a los últimos días de De Rocher en el corredor de la muerte, si bien el asesinato cometido por el condenado -y que también se muestra ya desde la primera escena- plantea una historia donde "no cabe duda de la culpabilidad", según la monja católica.
"Lo que se trata es de un viaje en el que se necesita cinturón de seguridad, porque se transforma la conciencia. ¿Cuando llegaremos a ese estado de humanidad en el que nos demos cuenta de que responder con violencia a la violencia no es la solución? No somos Dios, pero con nuestras acciones podemos cambiar las cosas", defiende Prejean.
Todo el equipo ha coincidido en resaltar la 'catarsis' a la que se llega con esta obra -que se representará en seis funciones, hasta el 9 de febrero-, verbalizado por la mezzosoprano Joyce DiDonato, quien da vida a Prejean. "La hermana Helen acepta una invitación y elige un camino difícil para plantar la semilla del amor. Esta compasión del personaje es lo que nos ha cambiado", señalaba.
Cabe destacar que la producción llega a España en un momento en el que se ha avivado el debate sobre la conveniencia o no de mantener las penas de prisión permanente revisable aunque, pregunta por ello, Sister Helen no se ha pronunciado específicamente al respecto.
Sin embargo, Prejean considera que "cualquier criminal es un ser humano y tiene derecho a la dignidad". "La pena de muerte se acabará pronto en Estados Unidos, no sé cuándo, pero ya es algo que se está empezando a mover y gracias al aspecto humano, se conseguirá. En este aspecto tenemos mucho que aprender de Europa, donde ya se ha superado esto y siguen adelante", afirmaba la monja católica.
Para Prejean -conocida como Sister Helen-, la lucha actual se centra en "dejar de ser coautores" de estas muertes junto al Estado. "La gente está empezando a despertar: en situaciones de vida o muerte no hay que dejar las decisiones en manos del Gobierno. Poco a poco nos vamos alejando de esto", aseveraba.
'Dead man walking' es la primera ópera de Jake Heggie y, desde su estreno en el año 2000, ha viajado por todo el mundo para representar más de 300 funciones. Su autor habla de un tema "universal pero a la vez profundamente americano", con una partitura "atemporal y actual, con resonancias a las emociones".
"Nunca se siente que la música se imponga, sino que pasa desapercibida y es un interlocutor que actúa a nivel inconsciente", ha resaltado el director musical, Mark Wigglesworth. Por su parte, el director de escena, Leonard Foglia, ha hecho un trabajo que se vincula directamente con el texto de Sister Helen en torno a "la capacidad de perdonar".