Decenas de miles de personas han participado en el desfile que cierra las fiestas del orgullo gay. Es un evento que se ha convertido en una referencia en toda Europa y que ha situado a esta ciudad costera catalana como una de las capitales del orgullo homosexual de todo el mundo.
Los participantes se visten para la ocasión e invierten horas para lucir perfectos en el desfile. No olvidan que esta fiesta también es una reivindicación: "Queremos demostrar que cuando caminamos juntos pueden salir cosas buenas".
Los organizadores esperan superar los 50.000 asistentes con el reclamo de la fiesta y los conciertos. Los restaurantes y hoteles siguen llenos tras cinco días de fiesta que terminarán el lunes con un homenaje a George Michael.