"Si llego a entrar en el hospital dos horas más tarde, estaría muerto", dijo Eminem al cineasta sobre un incidente que ya ocurrió años atrás.
"Mis órganos estuvieron a punto de fallar. Me hicieron diálisis y no creían que lo lograría", dijo el rapero de 40 años, que fue a dicto a Xanax y Valium entre otras pastillas fuertes contra el dolor.
"Cuando tomé mi primer Vicodin fue como esa sensación de 'Ahh.' Como si todo fuese no sólo dulce, sino que no sentía ningún dolor", explica el rapero.
La fuerza para dejar la dependencia de esas sustancias se la dio su rol de padre, dijo el cantante, pues ahora es consciente de que tiene que estar ahí para sus hijos.