Estrellas Michelin: la cocina española calienta fogones

Son el máximo reconocimiento que puede recibir un cocinero. Lograr una estrella Michelin aporta notoriedad, éxito y un incremento de la facturación de un 20%. Como cada año por estas fechas los fogones se revolucionan y los pucheros se llenan con especulaciones, llamadas, comentarios y quinielas. Martín Berasategui sigue siendo uno de los valores más seguros dentro de la guía. Es el cocinero que más estrellas tiene; nada menos que 10 repartidas entre todos los restaurantes que gestiona. Ya nos hemos acostumbrado a escuchar su nombre cada caño en estos premios.

Muchos restaurantes "locales" darán el salto al panorama internacional

Pero la gran incógnita siempre es tratar de averiguar si existirá un nuevo “tres estrellas”, el máximo galardón. Toño Pérez, en su restaurante ‘Atrio’ de Cáceres, es uno de los claros candidatos para subirse a lo más alto del pódium. La perfección de sus platos, la elegancia de su local y su magnífica bodega, una de las mejores del mundo, con una carta de vinos de 300 páginas, hacen que sea considerado por muchos como uno de los más firmes aspirantes.

Los hermanos Sandoval, con Mario al frente de la cocina de ‘Coque’, también son serios candidatos a esa tercera estrella. No en vano son numerosas las visitas que reciben de los inspectores de Michelin. Aunque quizás sea ‘Disfrutar’ en Barcelona el que pueda dar la sorpresa este miércoles en Sevilla, donde se desarrollará la gala de entrega de los premios.

Martín Berasategui sigue siendo uno de los valores más seguros dentro de la guía

Entre los que pueden subir de nivel, pasar de una a dos estrellas, el abanico de posibilidades es mucho más amplio. El restaurante ‘Bardal’ de Ronda o ‘Lú, cocina y alma’ pueden lograrla. Castilla y León, Galicia o Aragón son las únicas comunidades que no tienen locales con dos estrellas. Granada también reclama su entrada en el universo gastronómico, es la única provincia de Andalucía sin restaurante con estrella.

Pero el verdadero salto cualitativo lo supone la consecución de la primera estrella. Locales que hasta entonces formaban parte del universo “local” de una población, se convierten, en una noche, en destino nacional e incluso internacional para cientos de nuevos clientes.

Esos restaurantes que el próximo miércoles tendrán por primera vez una estrella son los que más se juegan. La estabilidad en estos premios es mayor a la hora de mantener las dos y las tres estrellas. Y con una responsabilidad añadida: entre los chefs que se incorporen a la guía estarán los jóvenes responsables de marcar en los próximos años el destino de la gastronomía española.