Encierros San Sebastián de los Reyes

Javier Gallego: "Un encierro para corredores"

El cuarto encierro de las fiestas de San Sebastián de los Reyes ha sido un encierro ideal para muchos de los corredores que han participado. Hoy se han abierto los huecos y eso significa que muchos de ellos han podido cumplir su objetivo de ponerse delante de las astas de los novillos.

En los primeros metros de la carrera ocurría justo lo contrario. Los novillos de la ganadería de Núnez de Tarifa han salido muy tapados por los cabestros. Todos salían agrupados en la cola del grupo y eso ha hecho muy difícil el contacto con ellos en la calle Real Vieja, el primer tramo del encierro. Aún así, en los últimos metros de esta calle se ha producido uno de los momentos más comprometidos del encierro, cuando uno de los novillos ha intentado alcanzar a un joven que ha logrado escapar por la parte opaca del vallado, lanzándose por arriba. Ha perdido una zapatilla, aunque no ha habido más consecuencias.

Después dos novillos han tomado la delantera y ha sido en ese momento cuando hemos visto grandes carreras en la calle Postas. En esta calle el contacto con el toro suele ser de unos pocos segundos porque la siguiente curva está muy cerca. Pero hoy, por primera vez en este año, hemos visto a muchos corredores disfrutar en esta parte del recorrido.

A partir de la calle Real hemos visto un encierro completamente diferente. La manada se ha estirado y se ha acabado dividiendo en tres grupos. Al principio han ido en fila india y luego es cuando se han abierto los huecos. La velocidad ha sido vertiginosa lo que ha hecho difícil meterse para algunos corredores. Aún así, muchos lo han conseguido y han podido disfrutar de ese placer que llevan buscando días.

Se podría decir que hoy muchos de los que se han lanzado al recorrido han conseguido su objetivo. Y eso es algo que no ocurre todos los días. Además los novillos han hecho gala de mucha nobleza porque apenas hemos visto derrotes, ni intención de coger.

Los novillos son más pequeños y tienen menos edad que los toros. No llegan a los cuatro años, aunque alguno de los de hoy rozaba esa edad por meses. Eso implica que pueden tener menos sentido, pero también pueden ser más rápidos. Y hoy lo han demostrado. Hemos vivido el encierro más veloz en la calle. Han llegado a la plaza en poco más de minuto y medio. Y a pesar de que el número de corredores ha estado en torno a los 2.500, no hay que lamentar ningún percance serio. Apenas dos asistencias por caídas.

Mañana tendremos seis toros de la ganadería de Ángel Sánchez y Sánchez. Son toros preparados para los rejones. Es decir, criados para tener la fortaleza de correr detrás de los caballos. La velocidad vuelve a estar asegurada.