Puro glamour y perfección, un espectáculo envuelto en un halo de sofisticación, es lo que se presenta en la semana de la moda de Madrid pero, ¿qué ocurre si bajamos esas prendas de la pasarela a la calle?
La mayoría de las mujeres no pueden comprar esas prensas pero sí copiar looks e inspirarse, algo que se suele practicar a través de las redes sociales. Mayte de la Iglesia trabaja en la pasarela de Madrid, es bloggera y cuenta con miles de seguidores en redes sociales, por lo que casi todo lo que viste se vende de inmediato.
'Influencers', 'it girls', 'bloggers', mueven millones de futuros compradores, son ya un canal de venta prácticamente imprescindible para las firmas de moda de todo el mundo.