El cómic "Manga" no es materia reservada sólo a los japoneses. Así lo han dejando claro en "Expomanga 2013", cita que se despide hoy en Madrid, un grupo de autores españoles dedicados al cómic nipón que ya saben lo que es competir con este género dentro y fuera de nuestras fronteras.
"Studio Kosen" o, lo que es lo mismo, Aurora García Tejado y Diana Fernández Dévora, dos autoras españolas que llevan publicando desde 1998, han visto cómo a lo largo de su carrera sus trabajos se han leído en Polonia o Estados Unidos, y en revistas como "Rolling Stone" o "Sobremesa".
"En la actualidad el manga está en crisis", ha contado García Tejado, que sabe lo que es pasar de publicar con "facilidad" a tener que "luchar mucho" para ver sus obras en manos de los lectores. "En América hubo un auge hace unos diez años -ha expresado- y, todo lo que era manga, o lo pareciera, les encantaba.
Todos los autores que teníamos estilo manga éramos bien recibidos allí". En estos momentos, y según la experiencia de García Tejado, las editoriales de cómic "parecen apostar" sólo por lo que ya cuenta con éxito, por lo que estos autores, pese a la gran calidad de sus trabajos, ven cómo se les cierran puertas antes abiertas de par en par.
El cómic manga hecho en España tiene su propia identidad, y son dos las diferencias con el que llega desde Japón: el trazo y la historia. En "Studio Kosen" su estilo ha "marcado la nariz" y la boca la han hecho "más redondita", lo que hace que no se parezcan al "manga más comercial".
Pero, sin duda, es la temática la diferencia más notable dada las diferencias que existen entre la cultura española y la japonesa. Así lo ha apuntado el ilustrador y director de la academia de ilustración "Academiac10", Carlos Díez, otro de nuestros dibujantes más internacionales.
Aunque Díez no se haya dedicado al manga, sino al dibujo de pin-ups cargadas de sensualidad, su trayectoria al frente de esta academia le ha hecho ver cómo la temática del manga español es un "mestizaje" de culturas. Un hecho que se ve también de manera muy clara en la obra de el joven dibujante onubense Manu López, también conocido como "Kuroudi".
A sus 27 años, López triunfa con su obra "Ataraxia", (Nowevolution), texto que le catapultó a lo más alto del manga español y cuyo tercer tomo está a punto de publicarse. "El manga hecho por españoles recibe muchas más influencias de otros tipos de cómic, como el americano o el francobelga, mientras que el manga japonés, generalizando, recibe únicamente influencias de otros mangas japoneses", ha especificado.
Este dibujante andaluz comenzó a interesarse por el manga " desde bien pequeñito" y su primer contacto fue la serie que marcó a toda una década "Bola de Dragón". "Por aquel entonces yo no sabía que aquello era manga -ha dicho- simplemente eran historias y dibujos que se centraban en la aventura y la amistad, y aquello me fascinó".
En "Ataraxia", López centra todas las historias un mundo virtual, pero no por ello los lazos que se crean entre los personajes son menos reales. Sus protagonistas viajan por multitud de parajes insólitos y se enfrentan a mil y un peligros. Pero aunque sus personajes viajen, López tiene claro que los ilustradores españoles tienen complicado darse a conocer en el país de origen de este tipo de cómic.
"Si un japonés quiere leer manga, casi con total seguridad, recurrirá a una obra japonesa", ha concretado. "Studio Kosen", Carlos Díez, y Manu López, han sido algunos de los principales protagonistas de Expomanga 2013, una de las mejores plataformas para darse a conocer y, cómo no, para reunirse con sus seguidores.
El salón Expomanga 2013 cierra hoy sus puertas en Madrid con una estimación de visitantes similar a la del año pasado, cuando acudieron a la cita algo más de 31.000 personas, según ha explicado la organización.