Al principio expresábamos la emociones con parentesis, dos puntos y con los signos del teclado, es decir, había que ser creativos. Después aparecieron los emojis, que son pequeños iconos digitales que representan objetos o estados de ánimo, y ahora hay emojis para todo.
Es una palabra de origen japonés de los 90. Y ante la duda de cómo se pronuncia, aunque los japoneses dicen 'emoyi', la RAE lo castellaniza y en castellano lo correcto es decir 'emojjji', con 'j'.
Tras entrevistar al coordinador general de la Fundéu, Javier Lascuráin, el día en el que se ha conocido que esta ha sido la palabra del año, Matías Prats no ha dejado escapar la ocasión para sacar a relucir su buen humor en pleno directo. Así se ha despedido el presentador de su invitado.