Con el mejor ritmo de Cuba arrancaba el decimoquinto festival del Habano. Aficionados provenientes de más de 70 países han disfrutado de la musica, el ambiente y el aroma de buenos puros.
Clases magistrales sobre la técnica del torcido y las tradicionales visitas a las mejores plantaciones de tabaco. Pasando después por sus fábricas, como ha hecho el ex-numero uno del tenis mundial Boris Becker, que inmortalizaba las explicaciones sobre la fabricación manual de estos puros.
Un festival que ensalza al Habano como símbolo de tradición, exclusividad y conocimientro y que durante siglos ha cautivado tanto a hombres como a mujeres.