La lluvia no ha hecho acto de presencia y el tradicional desembarco de los legionarios para trasladar al Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Animas, protector de este cuerpo militar, y posteriormente entronizarlo, el acto más emblemático de la mañana del Jueves Santo, se ha desarrollado sin ningún problema. Todo ello ante la atenta mirada de miles de malagueños, entre los que se encontraba el actor y pregonero de la Semana de Pasión de 2011, Antonio Banderas.
Los caballeros legionarios del Tercio Don Juan de Austria, tercero de la Legión, con base en Viator (Almería), llegaron al muelle 2 del puerto, en el Palmeral de las Sorpresas, en torno al mediodía, con sólo un pequeño retraso sobre la hora prevista, a bordo del buque Contramaestre Casado y al ritmo de la conocida marcha 'El novio de la muerte'.
Al grito del espíritu de la muerte, uno de los compromisos del credo legionario --"el morir en el combate es el mayor honor. No se muere más que una vez. La muerte llega sin dolor y el morir no es tan horrible como parece. Lo más horrible es vivir siendo un cobarde"--, han descendido por la pasarela, como también lo ha hecho la cabra. En el puerto les esperaban miles de malagueños, además de diversas autoridades militares y civiles.
A continuación, comenzó el desfile por el centro histórico hasta llegar a la explanada de Santo Domingo, donde se encontraban, entre otros, el actor Antonio Banderas; el alcalde, Francisco de la Torre; el subdelegado del Gobierno, Jorge Hernández Mollar; la delegada provincial de la Junta de Andalucía, Susana Radío; el presidente de la Agrupación de Cofradías, Rafael Recio; el hermano mayor de Mena, Antonio González, y miembros de la Corporación municipal, entre ellos los portavoces de los tres grupos políticos.