Se espera que el próximo curso 300.000 personas demuestren así su grado de conocimiento de nuestro idioma. Será un certificado ágil que contribuirá a extender el español. A diferencia de otros exámenes , en el SIELE (Servicio Internacional de Evaluación de la Lengua Española) todo es electrónico.
"SIELE está con los tiempos modernos, y presenta por tanto una originalidad, que se sirve de la red para aprovechar los cambios vinculados a los nuevos escenarios digitales", según el ministro de Cultura, Iñigo Méndez de Vigo.
Se podrá obtener en cualquiera de los cinco continentes, habrá centros de examen en todo el mundo pero, en principio, se reforzarán sobre todo en Brasil, Estados Unidos y China. Constará de cuatro pruebas que se pueden repartir en varios días.
El título que se obtiene tiene una vigencia de dos años. Este curso ya esperan un mínimo de 300.000 candidatos que se duplicarán en poco tiempo. Hay 550 millones de hispanohablantes y ningún examen de estas características.
Detrás de esta iniciativa está el Instituto Cervantes, la Universidad de Salamanca y la Autónoma de México. Las pruebas las diseñarán equipos expertos de estos centros y prestarán atención a las distintas modalidades de nuestro idioma.
Se puede hablar un idioma, pero hay que acreditarlo. Cada país concede títulos oficiales y los baremos, en el caso español, los establece el marco europeo de referencia para las lenguas.
Los títulos más populares de inglés en nuestro país son los clásicos de Cambridge que van desde los más básicos a niveles más avanzados. Similar al inglés y también compartimentado es obtener el título de alemán.
