Puig ha acogido este sábado el segundo día de toros en sus fiestas patronales. Durante el transcurso de la tarde se han soltado dos toros por las calles que ha tenido un recorrido rápido y limpio. Más tarde, ha sido el turno para las vaquillas, donde todo ha transcurrido sin incidentes pese a las críticas de algunos partidos políticos y asociaciones antitaurinas.
Pese a las críticas que generan este tipo de celebraciones, son muchos los recortadores que sacan a relucir sus habilidades y ante la expectación multitudinaria de los espectadores. "Son el mejor momento del año", comentan los vecinos de Puig. Pese a las críticas, estas fiestas de índole taurina se ha mantenido durante muchos años.
Las medidas de seguridad se han aumentado con el paso de los años para preservar la integridad física del asistente a la fiesta. "Hemos reforzado la seguridad tanto para las personas como para los animales", comenta José Badía, Secretariode Bpus al Carrer. El ayuntamiento también cuenta con los colaboradores, voluntarios que se encargan de velar por el correcto desarrollo del festejo.
Los vecinos podrán seguir disfrutando de sus fiestas patronales mientras que esta tradición centenaria siga encendida.