La melodía más famosa del rock nació de una tragedia. Deep Purple estaba grabando en una localidad suiza su nuevo disco. En la misma ciudad Frank Zappa ofrecía un concierto. Entre el público alguien lanzó una bengala y el techo del escenario comenzó a arder. Los chicos de Purple vieron el incendio con el lago Ginebra de por medio.
Este año se cumple el 40 aniversario de esa composición. Unas sencillas notas que forman la primera clase de todo aquel que aprende a tocar la guitarra. Un tema que llegó a encasillar a Deep Purple pero que les ha ayudado a entrar en la historia. Apasionados de las seis cuerdas se han reunido para celebrar ese aniversario y mostrar pleitesía a una partitura que, como entonces, mantiene el mito del rock.