Era el primer concierto de ‘The Boss’ en Australia en diez años y, como ya es costumbre, quiso convertir esta noche en Brisbane en la más especial para uno de sus fans.
Un niño de 11 años fue el afortunado a quien Bruce Springsteen invitó a cantar en el escenario ‘Waiting on a Sunny Day’. Tras su exitosa interpretación, 'El Boss' le despidió con todos los honores'.