Los letrados que ejercen la acusación en nombre de la familia de Carlos Parra, fallecido en el accidente, han informado de que desde tres vehículos distintos, en diferentes lugares y minutos antes de la colisión, se hicieron llamadas que "identificaron el turismo del torero al detalle, sin equívoco alguno".
En ellas, "el denominador común era denunciar una presunta conducción temeraria", pues mencionaban entre otras circunstancias "conducción irregular, continuos zigzags, invasión continua y reiterada del carril contrario, así como doble adelantamiento en línea continua a alta velocidad".
En consecuencia, los abogados Luis y Andrés Romero entienden que existe una "presunta conducta delictiva" por parte del diestro, según se deduce de las transcripciones de las llamadas realizadas por particulares al 112, una información que había sido solicitada por su bufete como diligencia de prueba y que ya ha llegado al juzgado de instrucción 9.
Los letrados y los herederos de Carlos Parra han expresado también su deseo de una pronta recuperación de Ortega Cano, que sigue ingresado en el Hospital Virgen Macarena de Sevilla desde el accidente sufrido el pasado 28 de mayo cuando se dirigía a su finca de Castilblanco de los Arroyos (Sevilla).
Por otra parte, los abogados han señalado que, si bien es cierto que hasta que no se entregue en el juzgado el informe técnico de la Guardia Civil no se podrá saber con certeza si hubo invasión del carril contrario por parte del vehículo del torero, han precisado que "sí es cierto que el único testigo presencial conocido hasta la fecha ha declarado que dicho vehículo se adentró en el carril por el que circulaba el fallecido y colisionó con él". El testimonio de este conductor, cuyo coche se vio afectado por la colisión, consta también ya en el juzgado.-
