Por primera vez, una casa de subastas española permitirá pujar por algunos coches clásicos de lujo, singulares y muy valiosos. Son vehículos muy codiciados por los coleccionistas, todos ellos están en funcionamiento y muchos de ellos esconden curiosas historias.
Es el caso de un Jaguar Coupe que ruge igual que hace 70 años y por el que los amantes del motor pujan, al igual que por un Roll-Royce de 1929, que goza incluso de premios a la elegancia y que perteneció a Mohamed Al Fayet y que más tarde pasó a manos españolas.
Son coches con historia y hechos a medida, pues el emblema que lleva el coche, una esfinge, está arrodillada porque el coche fue diseñado para un noble.
Su precio superará los 100.000 euros y es que son joyas sobre ruedas, como el caso de un modelo deportivo que fue fabricado en 1926 y que es único en España. Está en perfecto estado de conservación y se espera incluso que pueda participar en el clásico circuito de Le Mans.
Se trata de una de las inversiones más rentables pues estos vehículos pueden llegar a revalorizarse un 25% en solo un año después de haberlo adquirido y además de generar grandes beneficios, los inversores pueden disfrutar conduciéndolos.