El óleo 'Tête de femme', en el que el español Pablo Picasso retrató a Marie-Thérèse Walter, la musa que marcó su obra durante la década de 1930, se subastó hoy en la sede londinense de Sotheby's por 18,85 millones de libras (25,29 millones de euros).
El retrato, pintado en marzo de 1935, fue la estrella de una sesión en la que también se vendió "La leçon de piano", de Henri Matisse, por 10,78 millones de libras (14,47 millones de euros), y "Le palais ducal vu de Saint-Georges Majeur", de Claude Monet, por 11,57 millones de libras (15,52 millones de euros).
También alcanzó 11,57 millones de libras (15,52 millones de euros), incluida la comisión de la casa de subastas, la escultura de Auguste Rodin "Iris. Messagère des dieux", cuyo precio estimado estaba entre los 6 y los 8 millones de libras (de 8,04 a 10,73 millones de euros).
La obra de Picasso subastada, una visión geométrica y elegante de Marie-Thérèse, destaca entre sus trabajos de mitad de los años 30, dado que anticipa los elementos lineales que definirán sus composiciones cubistas más tardías.
El genio malagueño utilizó además en ese óleo una paleta de colores que no se había visto hasta entonces en su obra, en la que los naranjas y rojos agudos se combinan con tonos verdes y azules más moderados.
Picasso vio por primera vez a Marie-Thérèse en una calle de París, cuando ella tenía 17 años y él atravesaba una etapa turbulenta en su matrimonio con Olga Khokhlova. "Yo era una chica inocente. No sabía nada, ni de la vida ni de Picasso.
Había ido a hacer unas compras a las galerías Lafayette y Picasso me vio saliendo del metro. Simplemente me agarró por el brazo y me dijo: 'Soy Picasso. Tú y yo vamos a hacer grandes cosas juntos'", relató Marie-Thérèse años después, según recoge el libro "Picasso and the Weeping Women".
La joven quedó embarazada en 1934, tras lo cual Picasso inició un proceso de divorcio y redujo su producción pictórica. El retrato que se vendió hoy en Londres es uno de los pocos cuadros que el español ejecutó en esa época difícil, en la que dedicó gran parte de su creatividad a la poesía.
Entre los 38 lotes que salieron a subasta hoy, destacó además "La leçon de piano" de Matisse, una de las composiciones más valoradas del periodo que el artista pasó en Niza. El maestro francés pintó en 1923 una escena protagonizada por Henriette Darricarrère, su modelo predilecta durante ese periodo, y sus dos hermanos menores, en su estudio de la plaza Charles-Félix.
Se subastó, asimismo, una de las vistas que pintó Monet en su fructífera visita a Venecia durante el otoño de 1908. Monet, uno de los fundadores del impresionismo, captó desde un pontón flotante la fachada bizantina del palacio ducal y su reflejo en las aguas del Gran Canal.