En enero la hija adoptiva de Woody Allen, Dylan Farrow, hizo unas declaraciones en la televisión norteamericana en las que acusaba a su padre de haber abusado de ella cuando apenas tenía 7 años.
Con el movimiento #MeToo en pleno auge, pronto saltaron las alarmas y fueron muchas las personas de la industria cinematográfica las que empezaron a opinar y posicionarse a favor y en contra de Allen.
Sus proyectos también se vieron afectados por este escándalo, ya que Allen también perdió el apoyo de las productoras y las distribuidoras; que ante la polémica, prefirieron desvincularse de él o, directamente, no quisieron volver a saber nada del autor de películas como 'Midnight in Paris' o 'Annie Hall'.
La última película de Woody Allen, 'A rainy day in New York', no verá la pantalla de momento
Amazon Studios, la productora encargada de la última obra de Allen decidió no estrenar la película para evitar la polémica y evitar ultrajes hacia la compañía.
El actor Jude Law, que participó en el rodaje, aseguró ante los medios que "es una pena enorme que no vea la luz". "La gente trabajó duro y se volcó mucho con ella. Me encantaría verla", señalaba. Pese a las declaraciones, el actor británico evitó posicionarse en la polémica: "No quiero implicarme. No creo que tenga derecho a opinar y la situación es muy delicada".
Sin embargo no ocurrió lo mismo con el actor, Timothée Chalamet; y la actriz, Rebecca Hall. Ambos actores, que también participaron en el rodaje de la película, decidieron donar su salarios a campañas contra el abuso sexual; además renegaron del director de 'Vicky Cristina Barcelona' y prometieron no volver a trabajar más con él.
Los actores dieron la espalda a Woody Allen tras estallar el escándalo
Con las campañas de apoyo, como la del #MeToo o #Time’sUp, en pleno crecimiento, las reacciones por parte de los actores y actrices de la industria no se hicieron esperar.
La directora Greta Gerwig confesó que se arrepentía de trabajar para Allen en 'Roma con Amor', en 2012. Natalie Portman también quiso poner fin a su relación profesional con Allen al creer la versión de la hija de éste. Con ella, otras actrices como Greta Gerwig, Nina Shaw, Shonda Rhimes o Tracey Ellis Ross, se sumaron a la iniciativa contra Allen.
Hay quienes prefieren esperar a que la acusación se haga oficial
El actor, Javier Bardem, reconoció que volvería a trabajar con Allen. El intérprete español, que trabajó para él en 'Vicky Cristina Barcelona', expresó su solidaridad con el director debido a las excesivas críticas a las que estaba siendo sometido el cineasta. "Si algún día hay un juicio y se prueba que es cierto, cambiaría mi opinión, pero de momento nada ha cambiado", comentó.
Woody Allen cumple hoy 83 años, aunque no de la forma en que él hubiera deseado.