La gimnasta rusa Aleksandra Soldátova se retira por bulimia: "Mi cuerpo estaba tan frágil que daba miedo"

La gimnasta rusa de 21 años, Aleksandra Soldatova, ha anunciado una pausa en su carrera para combatir la bulimia. "Sí, estoy en medio de una pausa en mi carrera. El deporte profesional y la bulimia no se pueden compaginar, más aún unos Juegos Olímpicos, donde se necesita una salud de hierro", explicó Soldatova a la agencia Tass.

La gimnasta ha confesado que no quiso expresar su problema hasta hace dos años y que le llevó "varios meses tomar la decisión de admitir que realmente necesito ayuda", destacando que la bulimia "es una enfermedad terrible".

La entrenadora de Soldátova, Irina Viner-Usmanova, fue optmista en la recuperación de la joven gimnasta. "La salud ahora es lo primero. ¿Las opciones de volver esta temporada? Opciones las hay siempre".

La semana pasada Aleksandra fue noticia por su ingreso en un hospital de Moscú por unos cortes en el brazo, que ella insiste que fueron accidentales. Ya estuvo en observación por bulimia el año pasado tras el Europeo. "Mi cuerpo estaba tan frágil que daba miedo", indicó.

Según la prensa rusa, la gimnasta perdió el conocimiento en una competición en Portugal, lo que conllevó a ser apartada del combinado nacional y no asistir al Mundial de Bakú. "Ahora mi postura es la siguiente: curarme, pero sin prisas. Pero los entrenadores saben que quiero regresar y entrenar".

Soldátova, que logró su primer oro individual en el 2018 en el Mundial en la modalidad de cinta, aunque previamente se había colgado varios metales de oro por equipos. Tiene muy difícil optar a una plaza en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 tras perder el puesto en favor de Yekaterina Selezniova.