Culturismo

Ángel Calderón sigue sin bajarse del podio de Mr. Olympia

El culturista valenciano ha quedado en tercer lugar en la categoría 212. Con este resultado, Calderón suma su tercer podio consecutivo en la competición.

Ángel Calderón ha vuelto a demostrar porque es uno de los referentes en el culturismo español. El valenciano llegó a Las Vegas para completar su sexta participación en la competición más prestigiosa del culturismo, Mr. Olympia, pero lo hacía con la misma ilusión que la primera vez: "Mr. Olympia es donde todos los culturistas quieren llegar, ¿no? El mejor campeonato que hay en el mundo del culturismo, es que no tiene precio", comentaba el tercer clasificado de la categoría 212.

La categoría 212 es para aquellos hombres por debajo de los 96 kilogramos, con menor estatura; y por consiguiente, músculos menos voluminosos. Aún así, con la condición física con la que Ángel Calderón llegaba a la competición, optaba a ser uno de los favoritos para ganar, y asegurar estar en el top 3.

El primer clasificado fue Keone Pearson, que no dejó opciones al resto de participantes con su físico espectacular. La pelea estaría en el segundo puesto, entre Ángel y el estadounidense, Shaun Clarida.

La decisión final colocó al de Nueva Jersey en segundo lugar y bajó a Calderón al tercero. Esto provocó una gran controversia en los aficionados, que consideraban que el español debería haber conseguido la plata, porque sus músculos se veían en mejor estado que los de Clarida, más voluminosos y mayor presencia sobre la tarima.

Ángel se ha tomado esta decisión con deportividad y ha reconocido el trabajo de sus compañeros del top 3: "Siempre piensas que puedes ganar, ¿no? Pero los dos de arriba estaban muy fuertes, eh".

Una vida de mucho sacrificio

Sin duda alguna, para mantener el nivel y conseguir ese físico, los culturistas deben someterse a una vida de estrictas dietas y entrenamientos. En el caso de Ángel: "Entreno todos los días. Me levanto a las 5 o 6 de la mañana. Hago mis 20 o 30 minutos de cardio, hago mi ronda de abdominales y estiro. Luego voy a casa y desayuno".

Pero la preparación no acaba aquí: "A las 9 o las 10 me voy a entrenar. Se te suelen ir unas 5 horas en total entre cardio, estiramientos, abdominales y el entrenamiento". Los domingos, en lugar de descansar y recuperar fuerzas para la siguiente semana, Calderón confiesa que "los dedico a perfeccionar el músculo que tengo más retrasado".

Una vida y una preparación digna de campeón, porque Ángel sueña con conseguir estar algún día en lo más alto del podio cuanto antes: "El año que viene volveré mejor, y más fuerte".